Educación, controles, infraestructura y compromiso

Domingo 21 de enero de 2018
Sus más de dos décadas de incansable labor como capacitador y referente en la Seguridad Vial convierten al abogado Luis Di Falco en una voz más que autorizada para hablar sobre la problemática del tránsito en Misiones. Es por ello que desde hace varios años recorre la provincia como integrante del Programa de Seguridad Vial de la Vicegobernación, haciendo trabajos de educación destinada a la prevención y a la capacitación en seguridad vial. 
El Territorio se entrevistó con él, quien dio su punto de vista en relación a la expectativa que se tiene en la implementación de nuevas tecnologías en los vehículos para la disminución de accidente, como así también la cuestión de la capacitación y la cantidad de fallecidos que hubo el año pasado en siniestros viales.
“Las estadísticas siguen estando altas. Estamos quintos a nivel nacional y eso no es un orgullo, sino motivo de mucha preocupación en el que hay que trabajar mucho más para cambiar esta realidad. Cada año se inyectan en la Argentina un promedio de entre 700 y 800.000 vehículos a las mismas calles, rutas, avenidas y autovías”, alertó.
Estos vehículos “ocupan los mismos lugares y por la tanto hay que ordenarlo, reglamentarlo y buscar las condiciones para que esto no sea una cuestión de que año a año empeore más".
En cuanto al consumo de alcohol en los conductores, sostuvo que “básicamente los fines de semana el 50% de la gente que entra al hospital por un accidente de tránsito está alcoholizado. Y en algún porcentaje menor bajo los efectos de la droga”. Sin embargo, aclaró que los niveles bajan durante la semana. 
A la hora de referirse a las tecnologías de los nuevos vehículos, Di Falco dijo que “no todos los autos vienen con sistemas básicos y deberían tenerlo. Uno de ellos es el ABS, la gente compra autos pensando si tiene bluetooth o wifi y no si tiene ABS.  Sistemas de control de manejo que algunos autos no vienen y que en los países serios ya lo tienen de fábrica”.
“Hay muchas cuestiones que vienen por la escalera y la realidad viene por el ascensor. Lamentablemente es así, pero necesitamos una actualización de la Ley de tránsito. Los autos ya tienen  una pantalla de siete pulgadas, vienen con intercomunicador  para el teléfono, o  para usar el manos libres, y eso en Argentina está prohibido”. 

Cuatro ítems
El especialista fue muy claro a la hora de puntualizar cuatro aspectos en los cuales hay que hacer hincapié a la hora de trabajar en materia de seguridad vial. Como primer paso se refirió a la cuestión cultural. “Necesitamos mucha educación cultural, corregir a los que ya andan en la calle y no respetan la ley”. 
Por otro lado, se necesitan controles de prevención más dinámicos, ya lo que estáticos y en los lugares fijos, como generalmente se ven, “no sirven en términos de prevención”.
Una tercer pata importante -siguió el abogado- es la infraestructura. Y no es solamente -puntualizó- en el estado de las rutas, ya que la mayoría de los accidentes de tránsito que hay en la provincia se dan en las ciudades. “Hay que trabajar la problemática en  las localidades, en cada una de ellas hay una realidad diferente”. 
En cuanto al cuarto aspecto, señaló el compromiso. “¿Qué es el compromiso? Nosotros en Misiones tenemos 76 municipios, ¿Cuántos de estos están adheridos al alcohol cero? Solamente dos. Tenés 74 municipios que todavía no lo están. Entonces cuando hablamos de compromiso ese es el ejemplo, no hace falta plata para hacer modificaciones que puedan llevar a cambiar”, cuestionó.  
Y agregó que “el alcohol es una partecita, pero hay otros problemas. El 70% de los accidentamos que tenemos son motociclistas, entonces ¿qué plan tenemos hoy para atacar la problemática desde el punto de vista de los motociclistas? No hay. ¿Hay VTV en toda la provincia? No hay. Necesitamos una VTM en cada una de nuestras localidades y el decreto reglamentario que hay por ahí todavía no se ha puesto en vigencia”. 
"Tenemos que abrirnos la cabeza con esto y no cerrarnos con que así nomás somos en Misiones, o que es una cuestión cultural. Me niego rotundamente a que esto siga pasando así y es algo que depende de todos", insistió. 

Propuesta de reforma del Código Penal
El anteproyecto de reforma del Código Penal, que en marzo llegaría a manos de Mauricio Macri para ser presentado en el Senado, incluye modificaciones en relación con los accidentes de tránsito. Uno de los cambios importantes es que manejar alcoholizado o bajo efectos de drogas y circular superando la velocidad permitida pasarían de considerarse contravenciones a ser delitos contra la seguridad pública, aunque no generen un daño a otra persona.
De esta forma, tendrían consecuencias más allá de una multa o de la retención del auto. Por ejemplo, un test de alcoholemia positivo podría derivar en una pena de hasta tres años de prisión. Además, frente a ciertos agravantes -como violencia de género, discriminación o tenencia de armas- buscan que quien mate al volante vaya preso sí o sí.
Con la reforma, incorporarían el tipo penal de “peligro” para aquellos conductores que manejen habiendo consumido estupefacientes o más alcohol que el permitido. Ante estos supuestos, la intención es que se considere que el infractor cometió un delito contra la seguridad pública.
Otra inclusión fundamental, entre los peligros, es la realización de picadas. Contempla a quien “estuviese participando en una prueba de velocidad o de destreza realizada sin la debida autorización de la autoridad competente”.
Y no sólo buscan castigar al protagonista, sino también al resto de los involucrados. En este sentido la norma modificada, a la que le falta el visto bueno del Congreso, indica que “aplicará la misma pena a quien hubiese organizado o promocionado la prueba de velocidad o destreza o entregado un vehículo de su propiedad o confiado a su custodia, sabiendo que se utilizara para ese fin”.
El borrador, además, añade una pauta clave a la que deberán atenerse los magistrados a la hora de definir las penas. “Frente a ciertos agravantes, la idea es que la pena se ubique en el tercio superior. Ese es un cambio a incorporar en la parte general que deberá tenerse en cuenta para todos los delitos. De esta forma, se tornaría no excarcelable matar al volante ante, por ejemplo, supuestos de discriminación, violencia de género, desprecio por la condición de vulnerabilidad de la víctima o tenencia de armas, fuga, entre otras. La intención es reducir la discrecionalidad de los jueces” se explicó a los medios nacionales desde la Cámara de Casación Penal, donde impulsan la reforma.

Por Agustín Mazo
fojacero@elterritorio.com.ar