La UCR y las normas “Iram ideológicas”

Caminando por la calle Alberdi enfilando al Parque Paraguayo, donde vive nuestra histórica y hoy modesta costanera, me topé con un grafiti de origen radical, estampado por manos radicales, fiel expresión y síntesis perfecta de la vida interna de la UCR/2015.
El primer soplido del aerosol empieza por descalificar al candidato a gobernador de la UCR (el único elegido en elecciones abiertas, limpias y democráticas) adjetivándolo de ”traidor”; no parecieran los inspiradores del letrista anónimo- pensé- tener el mínimo entusiasmo de que González llegue a gobernador, es decir, a que la UCR vuelva a gobernar Misiones.
Por qué González traidor, porque dijo que “la UCR sola no gana”; y es cierto lo que dijo, lo saben propios y especialmente la renovación. Gana con un frente que sume al arco opositor y exprese a la ciudadanía que cree que llegó el tiempo de cambiar, que terminó un ciclo y empieza otro. Que ya son suficientes 16 años en el poder, que la alternancia es democracia.

En su aterrador mensaje termina el letrista anónimo con que “la UCR no se vende”… y tiene razón, el partido no se vende, pareciera se venden personas solamente.
La UCR nacional y provincial han tomado medidas fuertes, están decididas a volver al gobierno, no se resignan a ser un partido de oposición con un diputado más o menos mientras la mayoría pide aire fresco que cambie el clima borrascoso de la Argentina rota.
Es placentero refugiarse en la ideología- cómodo aislamiento- y juzgar desde el pedestal a los que se juegan. Es más fácil decir altisonantes discursos adornados con frases históricas principistas que agarrar el timón, comprometerse y gobernar como se debe.
Es desde el Gobierno donde se demuestran los principios, no desde el pico solamente; desde el Gobierno se ejerce la ideología con medidas concretas, lo otro -en este momento- son palabras para la tinta oficialista, para el desaliento y para curuvicar la oposición.
Un Gobierno decente, no corrupto y democrático que respete a la justicia y el bolsillo de la gente es un Gobierno de principios radicales e ideología radical. Si así no lo hiciese González, ahí sí, no nos alcanzarían los muros para tratarlo de traidor.
Un Gobierno que tome medidas que favorezcan a los más desprotegidos es pura ideología, especialmente en el terreno de la educación, la vivienda y la salud, donde pierden los que menos tienen. Eso es el radicalismo, como ya se demostró en el 83 y lo volverá a demostrar González… si dejan de poner piedras para que no llegue. Se puede y se debe disentir pero vale recordar a Ricardo Balbín: “El que gana gobierna, y el que pierde ayuda”
Pareciera que al radicalismo le imponen normas “Iram ideológicas” de estricto cumplimiento.
Sin embargo, el PJ ha sido cuasi fascista en el 46 (“imitar en todo a Mussolini menos en sus errores”, JDP) llevando como vice al antipersonalista Quijano, luego como vice  al conservador Solano Lima, de senador al rancio oligarca Sánchez Sorondo, de ultra izquierda cuando hizo falta:…“la maravillosa juventud” que ponía bombas; recontra neoliberal en el 90 con todos alineados; con el radical Cobos de vice después y lo que haga falta cuando se trata de tomar o permanecer en el poder. Que le ha dado buenos resultados no hay dudas, pero no le da autoridad para descalificar al radicalismo si busca aliados para llegar al poder. Extraña coincidencia hoy entre el Gobierno y sectores internos del partido.
El 29 hay una Convención Provincial Radical; en ella se decidirá si el partido conforma un frente con posibilidades de ganar o por el contrario enfrenta sólo el 2015 con seguridad de perder. Eso se vota.
Los convencionales tienen la palabra, la decisión y el destino de la provincia.

Ricardo Barrios Arrechea
Ex Gobernador de Misiones