Carta de lectores

Domingo 29 de noviembre de 2015

Aprendamos a convivir
Señor Director:
Hay un periodista que antes que Mauricio Macri ganara las elecciones amenazaba diciendo que se iría del país si perdía Daniel Scioli ... En realidad hay varios pero me inspiré en uno en particular.

El susodicho ratifica la fragmentación de una sociedad dividida en dos: “el odio, ellos; el amor, nosotros”.
Me pregunto, ¿de qué se jacta para plantear este rígido antagonismo en un momento donde las diferencias ideológicas arden?, ¿no podía emitir un mensaje un poco mas conciliador apaciguando subjetividades y pasiones políticas individuales, como debiera hacerlo un comunicador social?
En algún momento las acusaciones, agresiones y descalificaciones que emitió en un medio de alta exposición como lo es la televisión generarían previsibles repercusiones. Estas críticas y agravios que recibe ahora, como efecto boomerang, no debieran ubicarlo en un papel de víctima.
No pretendo justificar con esto la violencia, sino enfatizar el valor del disenso y la divergencia de opiniones. Vivimos en democracia, donde la libertad de expresión existe.  Algo que este individuo como periodista debería defender e implementar.
No porque el de al lado piense distinto a mí es mi enemigo. En democracia, no.
No están bien las generalizaciones, pero observo que en muchos casos esta herrumbrado el ejercicio democrático, la flexibilidad, la tolerancia y el diálogo. Estas posturas extremas de "si gana Scioli me voy", "si gana Macri me voy", lo certifican y es realmente penoso.
Aceptemos que el que no piensa igual a mí no es mi enemigo, que tiene derecho a pensar distinto así como yo tengo derecho a pensar distinto.
Aprendamos a convivir, como decía el Martín Fierro. Somos hermanos habitando un mismo país. Seamos unidos. Tengamos unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre nosotros hay peleas, nos devorarán los de afuera.
Pierina Fenocchio
Posadas


Tormentas y las previsiones que no se toman
Señor Director:
Posadas el viernes fue un río. Coincido plenamente con el título con que el diario contó las consecuencias de las intensas lluvias que afectaron nuestra zona.  Según los registros, llovió 115 milímetros en pocas horas. No hubo sectores de la ciudad capital que no sufriera algún inconveniente. Sobre todo en los lugares más bajos. Calles inundadas, avenidas que parecían arroyos y viviendas de la gente más humilde bajo agua.
El agua se llevaba todo. Estamos en temporada de lluvias intensas. Y es altamente probable que sucedan más eventos como este. Pasó este viernes, puede volver a pasar próximamente. Los únicos que parecen no haberse enterado son los de la Municipalidad.
Hay recomendaciones básicas que se deben cumplir para los casos de lluvias intensas, como la limpieza de los cauces de agua, hasta los más pequeños, desmalezamiento de la zona de alcantarillas, y recoger la basura de las calles para que no taponen los desagües. A eso debe sumarse la recomendación explícita a los vecinos para que no saquen la basura a la calle en caso de tormentas.
Nada de eso se cumplió anteayer. Defensa Civil contabilizó 250 casas inundadas, según las publicaciones. Con daños en los bienes de las familias. Por suerte paró, porque si llovía dos horas más la situación se hubiera convertido en drama.
Son cuestiones básicas que se deben hacer y no cuesta nada. Y evitan muchos problemas. Y ustedes tienen la responsabilidad de hacerlo. Y si sirve, les aviso: todos los informes meteorológicos que hay sobre El Niño dicen que en diciembre se repetirán tormentas y lluvias intensas.

Ramón Villalba
Posadas