Mark y Francisco

Domingo 28 de mayo de 2017
Este sistema ya no se aguanta. Tenemos que cambiarlo, tenemos que volver a llevar la dignidad humana al centro y que sobre ese pilar se construyan las estructuras sociales alternativas que necesitamos”. Es lo que planteó el papa Francisco en el Encuentro Mundial de Movimientos Populares, desarrollado en el Vaticano, en octubre 2014. Está claro, como añadiría el Sumo Pontífice en otros de sus tantos mensajes, que el ser humano corre el riesgo de ser reducido a un mero engranaje de un mecanismo que lo trata como un simple bien de consumo para ser utilizado. Y cuando la vida ya no sirve a dicho mecanismo, se la descarta sin tantos reparos. Así como plantea con firmeza el Papa que el sistema se debe cambiar con pasión e inteligencia, pero sin violencia, hay otros sectores que comienzan a repensar algunas ideas claves de igualdad en el mundo. Hace más de 200 años, Rousseau planteaba que el hombre podía vivir en libertad en una sociedad verdaderamente igualitaria. Es más, este suizo, siendo por entonces secretario del embajador en Venecia, propuso un contrato social, observando que las desigualdades de ese tiempo eran productos de malos gobernantes, y tenía fe en que el corazón del hombre podía cambiar tal situación. Pasaron más de dos siglos y los hombres que gobiernan el mundo se ocuparon más de la guerra que de la paz, de provocar más hambre que alimentar al mundo. Quizás por eso y porque hay más empeño por destruir que por construir una sociedad más justa, y en tiempos de absoluta incertidumbre, ahora Mark Zuckerberg -un joven de 33 años- lanzó numerosas ideas y sacudió al establishment, como se conoce al poder concretado y liderado por dirigentes políticos y poderosos financistas. El autor de la iniciativa claramente se quiere desprender y diferenciar de las inequidades con que los poderosos manejan el mundo, pensando más en acumular riqueza que en igualar oportunidades. De hecho, quien desafía con sus palabras al establishment, es el quinto hombre más rico del mundo. En un discurso brindado en la universidad de Harvard, el fundador de Facebook desafió a que todas las personas, en especial la nueva generación, puedan encontrar su propia motivación y en forma conjunta, avanzar en el interés social de la comunidad. El multimillonario, al hablar esta semana en uno de los centros más selectos y elitistas de Estados Unidos, no lo citó a  Rousseau pero habló de avanzar en un contrato social. Zuckerberg, después de doce años de haber abandonado la universidad, regresó en la semana a Harvard, donde anunció que había cursado todas las materias, y como cualquier mortal, celebró sonriente con su diploma en mano y brindó un discurso a la generación 2017. Ambos logros, el económico y el universitario, antes que estropear, realzaron su preocupación ante las desigualdades existentes en el mundo. Ese costado poco conocido ya había quedado en parte en evidencia en aquel encuentro que tuvo con el papa Francisco en agosto del año pasado. Quizás producto de ese encuentro se haya potenciado su preocupación respecto a las inequidades. Durante la audiencia en Roma, de lo poco que se supo habían hablado con el Sumo Pontífice fue de cómo usar las tecnologías de comunicación para aliviar la pobreza, alentar una cultura del encuentro y hacer llegar un mensaje de esperanza, especialmente a las personas más necesitadas. Quizás germinó el aliento del Papa, porque en el discurso brindado, Zuckerberg lamentó el nivel de desigualdad de la riqueza, dando cuenta de esta manera que todos los gobiernos no lo pudieron aún revertir. Como lo ratifica siempre la Iglesia, la familia es la base de la sociedad, y a criterio de Zuckerberg, es además la inspiración, al sostener que lo mejor de Harvard fue conocer a Priscilla, su esposa, que la llevó a gestar Facebook. Sobre la globalización, entiende que es evidente que hay algo mal en el sistema, si él puede ganar 1.000 millones de dólares en diez años mientras que otros millones de estudiantes no pueden ni siquiera pagarse la matrícula. Propuso a los millennials nuevos caminos que alumbran casi como una propuesta política del futuro. En tal sentido, sostuvo que para un joven encontrar una vocación no es suficiente, en tiempos de incertidumbre y desafío a crear un mundo donde todas las personas puedan encontrar su propia motivación. Desde Harvard motivó a los jóvenes del mundo -que lo tienen como una referencia- señalando que hay tres formas de construir su propio futuro, siendo parte de proyectos que generen impacto significativo, fomentando la igualdad de oportunidades y construyendo comunidades mundiales. En cuanto a la democracia, invitó a los jóvenes tomar las riendas del mundo que se está fraguando, modernizando el sistema para que todos puedan votar en línea. Y aún más revolucionaria aquella idea de aprender de manera personalizada, con libertad y espacio para equivocarse y corregir esos errores. Propuso explorar ideas como la renta básica universal. Nunca en un discurso de graduación se habrá escuchado el concepto de renta básica. Fue al plantear que la tendencia es el cambio de trabajo todo el tiempo, y que la salud no puede depender de que se tenga un empleo fijo.
Del mismo modo, sin entrar en discusión política, lanzó el desafío a la actual generación de hacer cosas trascendentes, como frenar el cambio climático antes de que destruya al planeta. Planteó que es tiempo de definir un nuevo contrato social. Quizás reinterpretando tales desafíos, Zuckerberg sugiere ser parte de proyectos que generen impacto significativo y recomendó al auditorio y en general a las nuevas generaciones en particular, fomentar la igualdad de oportunidades y construir una comunidad mundial que no mida sólo los indicadores económicos, y que la búsqueda no sea sólo generar progreso, sino crear un significado en la vida. Que no haya batallas entre países, sino guerra de ideas. En definitiva, propuso a los seres humanos reinventarse en cuanto a objetivos. Y se despidió con un llamado a la acción, al sostener que el cambio empieza en lo local. Indicó que los cambios globales empiezan pequeños. Y propuso crear comunidades y construir un mundo en el que cada persona tenga un propósito. De esta manera, buscó inspirar a la audiencia y habló de tener un propósito. Que en términos tradicionales debería leerse como utopía. Sugirió que cada uno en su vida tenga un propósito, no solo profesional o acumular riquezas, sino una finalidad a favor de las comunidades y tender la mano y dar oportunidades a los menos afortunados.
Impactó la trascendencia del discurso, no sólo por el ámbito donde se hizo, en Harvard, el primer conglomerado de inteligencia de Occidente, sino porque lo desgranó quien maneja una comunidad de dos mil millones de personas. Y los postulados sorprendieron por su similitud con el mundo que está proponiendo el papa Francisco, con quien Zuckerberg y su esposa han estado hace aproximadamente un año en una reunión en la que lo conversado poco trascendió pero que  finalizó con gestos de mutua simpatía.

Hacer patria
En la Argentina también fue una semana que podría ser utilizado para inspirar una revolución de ideas, aunque en gran parte se aprovechó para hacer política partidaria y hasta lanzamientos de candidaturas. Como se sabe, la de la Revolución de Mayo es una de las fechas más significativas para los argentinos, porque comenzó la gesta del primer gobierno patrio, entre criollos y españoles. Los eventos revolucionarios sucedieron en 1810 en la ciudad de Buenos Aires, por aquel entonces capital del Virreinato del Río de la Plata, una dependencia colonial de España. Desde temprano del 25 de mayo, los criollos se concentraron en la Plaza Mayor y al pasar las horas y no tener noticias, dieron aquel grito de tanta actualidad “el pueblo quiere saber de qué se trata”. Muchos actos se concretaron en el país, como sucedió en Misiones, oportunidad en que el vicegobernador Oscar Herrera Ahuad dejó inaugurado el nuevo centro cívico en Campo Grande.
Pero también al haber pasado más de 200 años, para ser más exacto 207 años, el pueblo, en diversos actos, aún quiere saber por qué en un país tan rico, hay tantos pobres; por qué no se pueden igualar las oportunidades y no se pueden terminar las grietas, por qué tantas injusticias. Los que se calzan la vestimenta de candidatos prometen siempre revertirlo, aunque no todos terminan por cumplir sus promesas, sino ya no existirían tantas demandas de parte de la sociedad. Corrupción, pobreza, educación, inseguridad, inflación y desempleo siguen siendo las prioridades de los argentinos, según encuestas realizadas este mes en el país.

Los desafíos
Es decir, son numerosos los desafíos que deberán enfrentar gobernantes y opositores, como se indicó, en el día patrio, cuando se lanzaron algunos candidatos como el caso de Sergio Massa y Margarita Stolbizer. Por su parte, Martín Lousteau, mediante un locro, apuntó a juntar fondos para la campaña, a la que se presentará sin el cobijo de Cambiemos. De mismo modo, en medio del festejo patrio y luego de la cumbre con los intendentes, Cristina Fernández dejó en claro que  estaría dispuesta a ser candidata en las próximas legislativas.

Semana complicada
Elisa Carrió una vez más hizo temblar al gobierno de Cambiemos. Esta vez apuntó sus cañones contra la número dos de la AFI, Silvia Majdalani, al sostener que es víctima de espionaje ilegal. Pidió que la echen y puso en duda su pertenencia al oficialismo si no cumplían con su ultimátum. Desde el gobierno al principio hicieron silencio y posteriormente el ministro de Justicia Germán Garavano, y el senador Federico Pinedo salieron a poner paños fríos. De algún modo apoyaron a Majdalani solicitando a la diputada que presente las pruebas correspondientes para que no haya condenas públicas. Carrió, que se cree la voz de la República, por ahora reculó y dijo que se lleva genial con Macri y que no se va de Cambiemos. La campaña todavía no empezó y seguramente el gobierno tendrá más dolores de cabeza del fuego amigo.
Otro momento duro para el gobierno fue en el Tedeum de la catedral, cuando el arzobispo porteño Mario Poli en el sermón y delante del presidente y ministros afirmó que mucha gente no tiene motivos para festejar porque carece de lo necesario para una vida digna. Con alto contenido social y sosteniendo que las inequidades generan violencia, el cardenal primado de la Argentina pidió superar la confrontación y redoblar esfuerzos para luchar contra la pobreza.

Cambiemos en Misiones
El radicalismo misionero terminará por definir hoy en la Casa Radical si finalmente concretan formalmente el frente Cambiemos en Misiones. Para diversos referentes prácticamente ello ya es un hecho, pero lo terminará de definir la convención. Luego quedarán por dirimirse las candidaturas. Se conoce que la candidatura a senador de Humberto Schiavoni no entraría en la discusión y de esta manera, le tocaría el primer lugar a diputado nacional por Misiones al radicalismo. Allí es donde todavía no está muy claro, porque Luis Pastori había hecho público el interés de continuar por un nuevo periodo, y al mismo lugar aspira ascender el diputado provincial, Gustavo González, entre otros dirigentes.

El peronismo define futuro
El Partido Justicialista (PJ) mostró que no estaría dispuesto a quedarse fuera de la pelea electoral. Lo van a hacer con una conducción de emergencia, para evitar la intervención, según explicó el senador y secretario de Acción Política del PJ nacional, Miguel Pichetto. Este santacruceño, que supo ser un hombre fuerte del kirchnerismo y que ahora se diferencia de ese espacio, es uno de los tres dirigentes de peso que comenzaron a recorrer el país para intentar regularizar la situación del PJ, ya pensando en la posibilidad de disputar el poder en 2019. Dejó en claro que las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso) no sólo definirán los candidatos a cargos nacionales de cada provincia, sino además a los mejores perfilados para conducir el futuro del peronismo.
Pichetto, en su paso por Misiones el último martes junto al gobernador de Formosa y presidente del Congreso del PJ, Gildo Insfrán, encabezaron en Posadas una reunión de dirigentes junto al actual presidente del PJ en la tierra colorada, Juan Manual Irrazábal.

A buen puerto
El proyecto de poner en condiciones y volver operativo el puerto de Posadas avanza con rapidez. Esta semana se procedió a la apertura de sobres para la licitación de las obras de infraestructura. De la apertura de las propuestas fueron parte el gobernador Hugo Passalacqua, quien encabezó el acto, acompañado por el ministro de Industria, Luis Lichowski; el intendente posadeño, Joaquín Losada; y el secretario de Obras Públicas de la provincia, Marcelo Bacigalupi.
En total fueron tres las empresas que se presentaron y esperarán el análisis exhaustivo que determinará cuál de los oferentes tendrá a su cargo la construcción de las obras edilicias de la administración del puerto para su operación y control. Se trata de uno de los pasos principales para lo que será la puesta en funcionamiento y recuperación de la vía fluvial en Misiones, que tiene en primera instancia la reactivación del puerto de la ciudad capital y en segundo término el de Santa Ana. Según estimaciones oficiales, las obras edilicias tendrán un plazo máximo de realización de ocho meses, por lo que el puerto estaría en condiciones de comenzar a operar cargas a inicios del próximo año.