Decide el ciudadano

Los argentinos concurrirán hoy a las urnas después de una semana de alta tensión social y emocional. La habitual fiesta cívica quedó opacada al confirmarse a último momento del viernes que Santiago Maldonado, está muerto. Fue el peor final, el más doloroso para los familiares y para millones de argentinos, al conocerse que el cuerpo hallado el martes en el río Chubut, en el departamento de Cushamen, pertenece a Maldonado.
El artesano de 28 años estaba desaparecido desde el 1° de agosto, tras una represión de la Gendarmería Nacional a una manifestación de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM). Pasaron casi 80 días desde que su desaparición, se convirtiera además en el centro de discusión y debate en el país. Las teorías y especulaciones inundaron los medios y redes sociales. Los familiares cargaron fuerte contra el Gobierno de Mauricio Macri, quien envió su pésame a la familia y habló con la mamá de la víctima que a su vez le expresó su malestar por tomar contacto tras tanto tiempo de búsqueda.
De manera oficial, fue el ministro de Justicia, Germán Garavano, quien salió a hablar en nombre del Ejecutivo, prometiendo brindar toda la ayuda a la justicia para encontrar al culpable. A último momento se conoció que no habría recibido golpes y habría muerto por ahogamiento por la cantidad de agua detectada en los pulmones. Pero la situación tuvo rumbos inciertos y desacertados, desde que la ministra Patricia Bullrich respaldara el accionar de la fuerza de seguridad en aquel operativo de agosto. Desde entonces, la verdad comenzó a taparse en medio de un alto nivel de politización. La grieta argentina, otra vez dividió a los argentinos.
Uno de los más recientes cuestionamientos pesan sobre los dichos de la diputada nacional de Cambiemos Elisa ‘Lilita’ Carrió, quien asoció a Walt Disney que por propia decisión permanece congelado. Tal vez quiso hacer alusión a las bajas temperaturas en la que estaba el cuerpo del artesano y aún peor, lanzando hipótesis de un posible suicidio o de que estuviera en Chile. Luego pediría perdón, pero ya había generado gran revuelo. La diputada a veces cree que tiene el monopolio de la verdad, pero suele chocar con la realidad como sucedió en esta ocasión. Hasta dijo muchas veces -totalmente convencida- que ella parió la República. La situación generó malestar en el mismo seno del gobierno, que a su vez resultó cuestionado al realizar una encuesta sobre los efectos que tendría este hecho en las urnas.
Hay referentes como el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien criticó la política errática en esta búsqueda y pidió que no quedara en la impunidad. Está claro que resta saber qué pasó con Maldonado, alejando esta vez toda especulación política. Desde que apareció el cuerpo, cambió todo. Dejó de interesar la campaña en el país central que fueron suspendidas. El esfuerzo de operaciones políticas y mediáticas por imponer la agenda judicial los días de veda, tampoco dio los efectos buscados.
En este clima se llega al día de las elecciones, con un hecho que había comenzado por la determinación de un ciudadano de 28 años, que se sumó al corte de una ruta por una protesta que él creía justa, aunque cometiera un delito y terminó muerto. Aún más lamentable fueron las múltiples operaciones que sufrieron los familiares, hasta encontrarlo y reconocerlo.
Todo lo previo refleja que, en la Argentina, en cuestiones como las actuales, hay aún serios inconvenientes y hasta dudas en cuanto a la transparencia y accionar de algunas fuerzas de seguridad y hasta de la Justicia, motivo por el cual terminó apartándose un magistrado en la causa. Razones suficientes para reflexionar sobre estos aspectos e intentar corregir y evitar que esta dolorosa historia de Maldonado se repita en el país.

Poco para festejar
Mientras se logra conseguir la verdad, este domingo habrá poco para festejar. Ni del lado de la oposición ni del oficialismo, que a su vez había suspendido todo acto de cierre de campaña.
A la tristeza e impotencia de este hecho, se suma otro que provoca bronca en los argentinos porque sus contribuciones al fisco fueron manoseadas, como sucede con la investigación en la causa por supuestas irregularidades en la compra de gas licuado. Por este hecho está detenido, Roberto Baratta, ex subsecretario de Coordinación y Control de Gestión del Ministerio de Planificación y ex mano derecha de Julio De Vido. Se lo acusa junto a De Vido de los delitos de defraudación contra la administración pública, por administración fraudulenta a raíz de sobreprecios en la compra de gas licuado entre 2008 y 2015.
Todo ello, durante la administración kirchnerista. Para pasado mañana martes, los diputados se reunirán para emitir dictamen sobre el pedido de desafuero de De Vido, tal como requirió la justicia para avanzar en la investigación sobre la causa por asociación ilícita. El ex ministro de Planificación fue procesado el último jueves por primera vez con prisión preventiva. Es decir, si no fuera diputado nacional por el Frente para la Victoria y por lo tanto no tuviera fuero, ya debería estar detenido.
Para el gobierno de Mauricio Macri estas elecciones generales representarán un verdadero referéndum de sus primeros dos años de gobierno. Las lecturas posteriores harán los ciudadanos en su conjunto, pero particularmente los empresarios de acá y del exterior.
Los hombres de negocios esperan que la administración demuestre que está quedando atrás aquella etapa volátil del país y se pueda pensar a largo plazo y en eso, mucho tiene que ver la confianza de la ciudadanía reflejada o no en los votos que implicarán esperanzas o más demandas. Por el lado de la oposición confían en ponerle límites al gobierno de Macri para cambiar el rumbo económico.

Lo que se pone en juego
El otro aspecto, es la puja de poder en el parlamento argentino, compuesto por los senadores que representan a las provincias y los diputados a los ciudadanos.
Este domingo se renovará un tercio de las bancas del Senado, para el período 2017-2023 y la mitad de la Cámara de Diputados, para el período 2017-2021. Es decir, más de 33 millones de argentinos están habilitados para elegir 24 senadores en ocho provincias y 127 diputados nacionales en las 23 provincias del país y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Para el Senado, serán tres bancas por cada provincia como sucede en Misiones, de los cuales dos lugares obtendrán el partido o frente con mayor cantidad de votos y la tercera banca para el segundo partido más votado. Por el frente Renovador de la Concordia encabeza la lista el actual diputado nacional, Maurice Closs y para diputado nacional, Ricardo Wellbach; por Cambiemos Misiones, Humberto Schiavoni para senador y Luis Pastori buscará ser reelecto diputado nacional. Por el Partido Agrario y Social, Héctor Cacho Bárbaro y para diputado nacional, el actual legislador provincial Martín Sereno. Además de Misiones, elegirán senadores en Buenos Aires, Formosa, Jujuy, La Rioja, San Luis, San Juan y Santa Cruz.

En Misiones
En la provincia de Misiones la disputa será más amplia, puesto que se renuevan 20 bancas legislativas, lo cual representa la mitad del cuerpo de legisladores provinciales. Será el Frente Renovador el que más bancas pondrá en juego, ya que serán nueve los diputados a cambiar por esa fuerza política. La lista la encabezan Martín Cesino y Natalia Rodríguez, por Cambiemos Misiones Ariel ‘Pepe’ Pianesi y Miguel Ángel ‘Tati’ López Vedoya.
Es que los radicales, en 2013 incorporaron cinco diputados, renovarán oficialmente dos bancas. Porque tres de los ingresados en 2013 dejaron de pertenecer al bloque del centenario partido y armaron su propio espacio.
De esta manera, por el frente Avancemos se presenta el radical de Vanguardia, Hugo Escalada y la representante del Sindicato de Camioneros de Misiones, Carina Suárez. En el Partido Agrario y Social también dejarán sus bancas dos diputados, aunque también aquí hubo sangría. Intentarán recuperar las dos bancas o ampliar, Isaac Lenguaza y Carlos Goring. En tanto por, Podemos se presentan Federico Knuppelholz y Jorgelina Zallio, entre otros. A ello se suma la elección para intendente en Arroyo del Medio y a concejales, convencionales y en Oberá, defensor del pueblo y un referéndum en El Soberbio para eliminar la reelección indefinida de intendente. En el Concejo Deliberante de Posadas se elegirán siete ediles para renovar la mitad de las bancas.

La campaña
Misiones se prepara para las elecciones, tras una campaña marcada por el respeto entre los candidatos. Más allá de las tradicionales y hasta folclóricas chicanas intentando debilitar al oponente, estuvieron ausentes las agresiones innecesarias o personales. Todo el proceso se vivió con tranquilidad y en paz. Son claros síntomas de madurez en el ejercicio democrático.
A esta forma adecuada de actuar de los espacios políticos y los aspirantes a cargos legislativos, se sumaron la forma de encarar la difusión de imágenes o escritos en la vía pública. Resultó mínimo para bien, las pegatinas de carteles o la colocación de pasacalles que no solo provocan contaminación visual y afean pueblos y ciudades que prometen mejorar, sino que está comprobado atentan contra la estabilidad de los postes de luz donde solían colgarse y superponerse. Es de rescatar además que, con algunas excepciones, que suele formar parte de toda regla, tampoco se excedieron en la contaminación sonora.
Como se indicó, esta vez quedó en evidencia modificaciones en la campaña electoral, que ilustran mayor madurez y cambio de época. En general, los candidatos optaron por la difusión de sus ideas en los medios y las caminatas en los barrios. Hablando de frente y cara a cara con los vecinos. No solo es la mejor forma de estar en contacto con los anhelos, sueños y dificultades de la ciudadanía, sino la manera más directa de palpar la realidad. Es de esperar ahora que los candidatos que sean electos, trabajen en transformar en concreciones las promesas de campaña. De lo contrario, podrían tener dificultades en sostener la mirada ante algún vecino en próximas campañas.
Todo lo previo ilustra que más allá de los colores partidarios o ideologías, los dirigentes deben entender que hacer política de manera sana y respetuosa beneficia a la dirigencia de manera colectiva. Cuidar estos aspectos no solo es saludable, sino es parte de la propia supervivencia política.