Dos familias quedaron en la calle por un voraz incendio en la chacra 101

Otra vez, el fuego fue el protagonista de un triste amanecer en la capital provincial. Dos familias se quedaron en la calle ayer a la mañana, tras un voraz incendio que en cuestión de minutos arrasó por completo con dos precarias viviendas de la chacra 101. 
De acuerdo a las fuentes consultadas, el siniestro habría comenzado minutos antes de las 6.30, en uno de los dos inmuebles que estaban asentados en un terreno ubicado exactamente en la esquina de la calle 80 y la avenida Zapiola, a pocas cuadras de Chacabuco. 
La chispa que originó el incendio y que casi derivó en una tragedia, se habría provocado por un cortocircuito registrado en el baño de la vivienda que habitaba Mercedes Márquez (57), junto a sus hijos  Javier (32) y María Belén Neu (24), y tres nietos de entre 5 años y 1 mes de edad.
En diálogo con El Territorio, la mujer que hace 45 años reside en el barrio, relató que “todo empezó por un cortocircuito. Mi hija estaba durmiendo y mis otros dos hijos empezaron a moverse para salvar las cosas. Uno de ellos está todo lastimado porque se llenó de humo el lugar y él quedó adentro. El otro está en el hospital porque se quemó todo el cabello, la cara, el pecho y en los brazos”.
En este caso, Márquez hace referencia a Sergio Neu (34), su otro hijo que residía en la vivienda lindante, la cual también se redujo a cenizas en pocos minutos. El hombre vivía allí junto a su pareja Patricia (27) y sus dos hijos, de 4 años y 2 meses.
El herido fue trasladado al Hospital Madariaga ayer a la mañana, pero fue dado de alta a las pocas horas, dado que sus lesiones no eran de gravedad, según confiaron voceros médicos.
“Se prendió todo adentro. El fuego empezó en el cablerío, se fue por todos lados y ahí ya no pudieron salvar nada, ni la muñeca siquiera. Lo material se perdió todo. Pero por suerte mi nuera y mis nietitos pudieron salir,  porque sino podrían estar muertos. Los vecinos ayudaron a sacar a la gente de adentro. Para rescatar a una de las bebas tuvieron que romper una puerta”, describió la mujer, mientras desde la vereda de un vecino observaba lo que quedó de su casa y recibía la contención de todos.
Además, el damnificado graficó cómo las llamas no dieron tregua ni dejaron tiempo de maniobra a los solidarios. “Los vecinos vinieron a tirar agua, pero ya no se podía apagar más; cuando los Bomberos vinieron ni agua tenían”, reclamó.
Esa misma mañana, el personal de la Municipalidad y del Ministerio de Desarrollo Social se acercó a los damnificados para colaborar y brindarles asistencia.
Los damnificados resaltaron la solidaridad de los vecinos, que se sumaron con lo que podían para intentar sofocar el fuego. Uno de ellos, Santiago (22), fue destacado por todos porque se metió entre las llamas para rescatar a la niña de 5 años que había quedado atrapada en una habitación.
Producto del incendio, las dos familias perdieron todo lo que tenían. Los niños quedaron sin alimentos ni vestimenta. Por el momento, tienen la vivienda de un conocido a disposición, pero necesitan con urgencia de pañales, frazadas y ropa para niños, preferentemente.
Pocas horas después del hecho, en otra muestra de solidaridad, los vecinos comenzaron a hacer llegar algunas donaciones para los damnificados y ante cada entrega se observaba un emotivo abrazo entre las partes.
Para colaborar con las familias, los interesados pueden comunicarse al 3764-197978 o bien dirigirse a la delegación del barrio.
En el hecho intervinieron el personal de la Comisaría Decimoséptima y una dotación de la Dirección de Bomberos.
En cuestión de pocas semanas, en Posadas se registraron siniestros similares en una vivienda de Villa Sarita, en una fábrica de colchones, en una casa quinta sobre la ruta 12 y en varios asentamientos del barrio Santa Cecilia.