Condenaron a Fariña por evasión y ahora investigan a Echegaray

Viernes 24 de noviembre de 2017
Leonardo Fariña declaró en contra del empresario Lázaro Báez.
El empresario arrepentido Leonardo Fariña fue condenado en el día de ayer a cuatro años de prisión efectiva por el delito de evadir más de doce millones de pesos en la compra de un campo en Mendoza.
El Tribunal Oral Penal Económico 1, integrado por los jueces Claudio Gutiérrez de la Carcova, Jorge Pisarenco y Susana Pellet Lastra, condenó  a Fariña por el delito de “evasión agravada”.
Además los magistrados ordenaron abrir una investigación para determinar si hubo responsabilidad de Ricardo Echegaray, titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) en ese momento, por no cobrar esos impuestos.
La semana pasada la actual titular de la Fiscalía en lo Penal Económico, Claudia Barbieri, pidió que Fariña fuera condenado a la pena de cuatro años de prisión, mientras que desde la actual defensa oficial de la Afip se solicitó siete años para ese hombre.
Ayer se produjeron sus últimas palabras antes de conocerse el veredicto. En esa oportunidad Fariña le agradeció a los jueces por el tratamiento durante el juicio. Luego llegó el  fallo final.
Fariña fue condenado por la compra de un campo en la localidad mendocina de Tupungato, el 16 de diciembre de 2010, por un valor cercano a los 5 millones de dólares en efectivo y que luego vendió en 1.800.000 de la moneda norteamericana.
 Por esa operación, el ex marido de la vedette Karina Jelinek debió pagar 4.620.000 de pesos en concepto del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en el período del año  2010, además de 7.700.000 de pesos por impuestos a las ganancias, pero el hombre no lo hizo.
Por el caso, Fariña estuvo detenido dos años y 20 días, entre 2014 y 2016, y fue liberado cuando ingresó al Programa de Protección de Testigos e Imputados  del Ministerio de Justicia de la Nación, al declarar como arrepentido en una de las causas judiciales abiertas contra el empresario kirchnerista Lázaro Báez, por el delito de lavado de dinero. 
En el juicio, Fariña sostuvo que compró el campo para Báez, de quien era los recursos económicos específicos para esa adquisición.
Pero la fiscal Barbieri y la Afip señalaron que tanto la escritura de la compra como la presentación respectiva ante el Registro de la Propiedad Inmueble de la Provincia de Mendoza se hicieron a nombre de Fariña y que por lo tanto el campo era suyo.
Además de la condena, el tribunal dispuso que se abra una causa para investigar las circunstancias en las que Fariña vendió el campo ante la sospecha de que haya sido “una operación simulada”.
El próximo jueves se conocerán los fundamentos del veredicto. 

Otro frente judicial
El ventilador que prendió el arrepentido Alejandro Vandenbroele, acusado de ser el testaferro de Amado Boudou para quedarse con la imprenta Ciccone, tuvo esta semana sus primeras consecuencias: la Justicia indagará como sospechosos de maniobras de corrupción al gobernador de Formosa, Gildo Insfrán ; al banquero Jorge Brito, y al ex jefe de la Afip, Ricardo Echegaray.
Todos son hombres poderosos y hasta ahora habían salido indemnes del escándalo Ciccone. Pero el miércoles el juez federal Ariel Lijo, con las revelaciones que hizo Vandenbroele, decidió avanzar sobre los empresarios y funcionarios a los que complicó con su confesión.
Lijo dispuso que Brito y Echegaray declaren el 27 y 28 de noviembre, respectivamente, y les prohibió la salida del país, mientras que Insfrán fue citado para el 4 de diciembre.