Cómo perder los kilos de más sin obsesionarse en el camino

Miércoles 20 de septiembre de 2017

1. Nuevos objetivos.
Ponete nuevos objetivos. A veces, el empujón que nos falta para mejorar nuestros hábitos y convertirlos en unos más saludables es, simplemente, tener un rumbo. Por eso, si buscás motivación para empezar con ganas esta primavera, anotá en el calendario qué objetivo buscas y cuándo querés conseguirlo.

2. Sin prisa.
Sin prisa pero sin pausa. No consiste en correr hacia la meta, sino en llegar a ella sin que te falte el aliento. Por eso, cuando se trata de mejorar tu estilo de vida, la clave es ir cambiando pequeños detalles, cada vez más significativos, hasta que los veas como parte de tu vida y no te cueste llevarlos a cabo. Empezá añadiendo alimentos saludables al menú y quitando los malos poco a poco.

3. Adaptarse.
Que el ejercicio se adapte a vos, y no al revés. No te fuerces a practicar un deporte que no te gusta. Si querés ver cambios, y mejorar, necesitás continuidad, y para ello debe engancharte lo que hacés. Tenés que disfrutar. Si no es así, además, estarás dejando de lado todos los beneficios psicológicos que te ofrece la actividad física.

4. Pesarse.
No te peses todos los días. Para empezar, la balanza no es la herramienta más precisa cuando se trata de controlar el peso, ya que al empezar a hacer ejercicio puede que pierdas volumen y no kilos. Además, el peso puede variar de un día para otro, dependiendo de múltiples factores. Intentá pesarte cada dos semanas como mínimo. Mismo día, misma hora.